13 oct 2011
Raval
Cierra las ventanas,
tengo frío
y entran aviones.
El televisor habla raro,
y ya hace un rato
que bebemos sin dejar de mirarnos,
la sinceridad nos destruye
frenética
e imparable
recorriéndote en círculos
atravesando túneles.
Mira que pasa
en el horizonte
que va desde tu pierna izquierda
a la mejor de tus sonrisas,
me he convertido en ángel
y he succionado el veneno
que nos corrompía.
Seré tu mesías
tu ídolo de masas
tu dios de mentira
tu polvo hecho metralla,
pero no me digas
que no hay día
en el que no te retuerces
mordiéndote el labio
loca por la prisa
de tanta avarícia,
sueños maltrechos,
epifanías.
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2 comentarios:
Por mi ventana también entran aviones estos últimos días. Aviones y nubes y otoño, por favor, que llegue el otoño ya. Cuántos agujeros en la pared de tantos aterrizajes forzados...
En mi ventana, que está cerrada por el frío de un invierno que ya llega, impactan aviones con mensajes de un tiempo que ya no es. Mañana la abriré para ver si llegan noticias de ahí arriba, que desde que cayó el satélite ya espero cualquier cosa; no cierres la tuya, que quién sabe... :)
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